La imagen pública es de suma importancia para cualquier persona que trabaje en el medio del espectáculo, así como para los periodistas que obtienen cierta fama en radio, TV o medios impresos.
Especialmente para los periodistas, su ética, así como la credibilidad son sus cartas de presentación más poderosas. Se han conocido casos en los que, cuando alguno de esos factores flaquea, la carrera del comunicador se derrumba por completo.
Sin embargo, existen algunos casos en los que, a pesar de la pérdida de confianza de parte de la audiencia, el periodista continúa trabajando, esto solo se podría explicar cuando dicho comunicador es una herramienta útil para el statu quo de la empresa.
Este es precisamente el caso de Carlos Loret de Mola quien fuera durante casi 19 años uno de los periodistas estrella del gigante de los medios, Televisa.
Loret cautivó a la audiencia gracias a varios factores: Su juventud, su estilo en ocasiones incisivo durante sus entrevistas y las notas vistosas que presentaba durante su noticiero.
Basta recordar su etapa como corresponsal de guerra en Afganistán o cuando emitió en vivo la captura de una banda de secuestradores, lamentablemente después se sabría que estos y otros momentos memorables del comunicador eran solamente montajes bien planeados para explotar la curiosidad de la audiencia.
Aún así la popularidad de Loret no decayó tanto como podría pensarse y es que su carisma hacía que la gente siguiera confiando en él, aunque todo tiene un límite.
En 2019 Loret de Mola y Televisa terminaron su relación laboral de 18 años, algunos creen que esto se debió a una censura de parte de Andrés Manuel López Obrador, sin embargo, la realidad es que el desgaste de la imagen de Loret ya era insostenible y perdía audiencia día con día.
Quedarse sin empleo es un fuerte golpe para cualquier persona, pero no para Loret pues para ese momento él ya era un periodista millonario, pero ¿Cómo obtuvo su fortuna?
Inversiones en bienes raíces
Carlos Loret de Mola y su esposa Ruth Berenice Yáber Coronado no perdieron tiempo y comenzaron a adquirir propiedades en la Ciudad de México, hasta la fecha según una investigación del medio Contralínea el matrimonio es dueño de 13 departamentos que tienen un valor en conjunto de casi 100 millones de pesos.
Las fechas de compra varían, pero la mayoría de los departamentos se adquirieron entre la década de los 2010-2020, pagados al contado y en zonas exclusivas de la ciudad como Lomas de Chapultepec o la Nápoles.
Otra de las propiedades de Loret es un enorme rancho ubicado en Valle de Bravo, Estado de México, que tendría un costo de, por lo menos, 120 millones de pesos.
Loret de compró la propiedad a Miguel Limón Rojas, ex secretario de educación pública en el sexenio de Ernesto Zedillo y padre de la también controvertida Lía Limón, ex alcaldesa de Álvaro Obregón en la CDMX.
Miguel Limón Rojas se encuentra acusado por despojo por vecinos de Petatlán, Guerrero, de acuerdo a la revista Proceso este sería un modus operandi del ex secretario pues se enfoca especialmente en terrenos con un alto valor comercial y turístico, llegando incluso a utilizar escrituras falsas para hacerse con el poder de dichos terrenos.
Loret de Mola y su esposa también son dueños de un departamento de lujo en Miami, mismo que adquirieron mediante una empresa fantasma llamada Bedfordbury Group con sede en las Islas Vírgenes Británicas.
Además de eso, también capitalizaron la imagen de Loret creando la empresa “La nota es la nota”, la cual es la encargada de cobrar los honorarios del periodista por presentaciones en conferencias, programas de TV o radio o su colaboración en columnas de diarios impresos.
Así, Loret y su esposa, Ruth Berenice se han convertido en expertos de la diversificación de los pasivos, sorteando la mala imagen de Carlos, aunque las sospechas de conflicto de intereses siempre están presentes cuando se trata del patrimonio de los Loret-Yáber.